Fraternidades

Las fuerzas vivas de la Iglesia se manifiestan a través de muchos Movimientos, los que están previstos en el Código de Derecho Canónico (Canon 298). Tales Movimientos agrupan a los fieles que, inspirados por el Espíritu de Cristo, cultivan una espiritualidad particular, colaboran en un mismo servicio eclesial, asumen algunos medios de santificación para alimentar su vida cristiana y acción apostólica en sintonía con la Iglesia. Llevan el nombre genérico de Movimientos eclesiales y se distinguen de los Institutos religiosos y seculares.

Los Movimientos de Fraternidades tienen naturaleza, finalidad y espíritu propio, buscan la santificación de sus miembros y ejercen un apostolado. Les caracteriza una unión profunda entre sus miembros, una vida con Dios y una actividad apostólica.

 Normalmente, en nuestras Fraternidades utilizamos los siguientes términos:

• Familia Marista: Conjunto de todas las personas (laicos, laicas y hermanos) que adhieren de diversas maneras al Carisma Marista.

• Fraternidad: Comunidad estable de personas que se comprometen a vivir según el Proyecto de Vida del Movimiento Champagnat de la Familia Marista.

• Fraterno (a): Miembro de una Fraternidad. Persona que integra una Fraternidad.

• Hermano(a) Mayor: Fraterno (a) que es responsable de coordinar las actividades, animar la vida de su Fraternidad por un tiempo determinado y representarla. Es elegido (a) por los demás miembros.
• Guía o Asesor (a) de la Fraternidad: Hermano, laico o laica (puede ser un matrimonio), reconocido por la Provincia, que tiene por misión la animación de uno o más grupos que van camino de constituirse primero en comunidades y después en Fraternidades.

• Asesor Sectorial de las Fraternidades: Hermano, laico o laica que acompaña al Equipo de animación y al Movimiento en el Sector.

• Coordinador Provincial: Responsable del Movimiento Champagnat de la Familia Marista a nivel Provincial.